Si algo triunfa en verano más que los flotadores de flamenco son las sopas frías. Y, no nos vamos a engañar, la reina de todas ellas es la receta de salmorejo. Lo sentimos gazpachibers, pero eso es una realidad.
El salmojero, una sopa con historia
¿Sabías que la receta de salmorejo se remonta al Paleolítico? Impresionante, ¿no? Aunque no tanto si tenemos en cuenta que las formas primitivas de elaboración consistían en el triturado de alimentos mediante presión.
El salmorejo tiene cientos de variantes, aunque la receta que conocemos hoy es relativamente reciente.
El tomate es un ingrediente que se incorpora a la dieta europea después de la colonización del continente americano, por lo tanto, su uso extensivo en nuestra gastronomía no se producirá hasta bien entrado el siglo XVII. Antes de esto ya se hacían majados con otras hortalizas y harina de trigo como espesante. Cuando, finalmente se incorpora el tomate a los majados tradicionales mozárabes, surge esta maravillosa sopa que ya es una joya de nuestra cocina.
En un principio, el salmorejo es una receta de aprovechamiento y muy humilde. El uso de pan duro e ingredientes baratos y de proximidad como el ajo y el tomate, la convierten en un buen recurso si se quiere comer bien y por poco dinero.
Receta de salmojero con jamón y huevo duro
Ingredientes de salmorejo para 4 pax
– 1 kg de tomates bien maduros. Los tomates pera son ideales para esta preparación.
– 200 gr de miga de pan duro
– 2 dientes de ajo
– 150 gr de aceite de oliva virgen extra
– 30 gr de vinagre de jerez
Ingredientes para los toppings
– 200 gr de jamón serrano loncheado
– 2 huevos
– Aceite de oliva virgen extra
En esta receta prepararemos primero los toppings para que se enfríen mientras hacemos el salmorejo.
El topping de jamón vamos a hacerlo de 2 maneras distintas, ¿os parece?
- Crujiente de jamón al microondas:
Es una forma sencilla, práctica y saludable de preparar nuestro topping de jamón serrano. En un plato apto para microondas colocaremos una hoja de papel de cocina, una loncha de jamón, y otra hoja de papel. Así, hasta completar los 200 gr.
Cuando tengamos nuestra “torre”, introduciremos el plato en el microondas poniéndolo a máxima potencia durante 6 minutos. El jamón quedará seco y crujiente. - Crujiente de jamón en sartén:
Esta otra opción es, en nuestra opinión, más sabrosa. Corta en tiras los 200 gr de jamón y, con una gota de aceite, saltéalo en la sartén hasta que quede tostadito.
Cómo hacer el salmorejo:
En un vaso para batidora ponemos los ajos pelados, los tomates y un pellizco de sal. Cuando estén muy bien triturados, añadimos el pan y el vinagre y volvemos a batir a máxima potencia. En el momento en que ya esté todo bien integrado, bajamos la potencia a la mitad y vamos incorporando el aceite en un fino chorro mientras batimos.
Podemos colarlo o no, depende del gusto de cada uno. Si los ingredientes estaban fríos no hará falta nada más que añadirle el crujiente de jamón y daditos de huevo cocido y… ¡ya está lista tu receta de salmorejo con jamón y huevo!